lunes, 28 de marzo de 2011

Perdido en ti.

Tú sabes cómo hacer que me pierda entre tus ojos, me enrede entre tu mente y me desvíe por tu cadera. He vivido a tu lado historias sin sentido que siempre serán las más hermosas. No quiero volver a sentir los días eternos que paran al reloj mientras no estoy contigo, no quiero no sentir tus manos recorrer mi rostro alumbrado por la luz de tus ojos, por tu tranquilidad densa. Nuestros labios vuelven a congelar el tiempo rozando lo nuestro mientras leo lo escrito en tu cuerpo, el toque dulce de tu personalidad, los versos suaves que veo en tu mirada. Analizo lento tu ser por dentro. Encuentro lo que hace que tú seas lo que eres, lo que provoca que sienta que esté insertado en el anhelo. Solo no soy nadie y contigo soy más que tiempo.

jueves, 24 de marzo de 2011

Querida indiferencia.

Me muevo frente y sobre la humedad, mis pies se mueven al ritmo del reloj, sumerjo mi rostro en la cruda sensación del suelo. Busco con mis pies el sonido de una hoja seca, ese sonido agradable que el silencio da cuando mis pasos la ahogan. Ya no suenan, el cielo las ha mojado. Quitándome a pedazos el sonido curioso y exquisito. Nos veremos en otro año, en otro otoño. Después de que la lluvia se canse de mojar la tierra, después del nacimiento de las flores. Después de que el sol alumbre y acalore los días volverá otra vez, hará caer las hojas y podré pisarlas para oír el agradable sonido de su suelo frío. Interesantes días esos donde cambian los cambios, días que me convencen a golpes que nada es para siempre.
Ha vuelto, la indiferencia de su cielo me hace sentir más curioso. Pero ya han pasado los meses y la tierra pide a gritos la nueva lluvia. Este Invierno me niega la seguridad (seguridad que está, y puede ser que no la quiero ver). En este tiempo me siento como perdido entre el frío y los abrigos. El silencio ya no se escucha. ¿Dónde está con su seguridad y sus días color gris? ¿Dónde estás querida indiferencia?

jueves, 10 de marzo de 2011

Porque todo cuesta.

¿Puedes ser quizás tal vez? ¿Un transportador de qué?
Vendría bien ser como un camino recorrido, anda, ya sabes el camino.
Coge del suelo lo que cae cuando tú alma y mente se despoja al escuchar quizás que respuesta.
Tomar las decisiones con la actitud que se toma cuando las decisiones son correctas.
¿Qué importancia tiene algo cuando no te cuesta?
Todos nosotros cometemos errores, cuando uno quiere perdona.
La vida puede ser que parezca muy cabrona.
Pero te tengo a ti, quien me descongestiona.
Amo amarte, amo escucharte, amo discutir y después abrazarte.
Parecido a dos niños balanceándose sin saber que son los problemas.
No me interesa conocer ningún lema.
Convertimos la felicidad en una utopía lejana.
Sin darnos cuenta que no está más allá de una vuelta a la manzana.
Enlázate, atrápate y envuélvete en sábanas juntos a la persona que tú amas.
Perder tu presencia, fue eso siempre a lo que más yo le temía.
Tarareo junto a ti. Y agradezco por la tranquilidad de tu compañía.
De tu cariño jamás me aburriría.

sábado, 5 de marzo de 2011

Todo.

Imagina que eres un ser que imagina. Que puede llegar a decirte que él una noche soñó que en su propio mundo existía alguien más que él.
No me refiero a que exista alguien superior. Todos somos superior y todos somos superiores en todo.
Porque todo lo que hay, es una ilusión, alguien se paró y dijo -.Yo quiero que las cosas sean así y así es como debe ser. ¿Por qué? Nosotros sumisos lo aceptamos. Creo que no somos nada. Porque somos todo. Yo quiero serlo todo y nada.
Crear mi propia ilusión.

Suficiente.

Cada día me doy cuenta de algo nuevo, cada problema termina en algo bello.
Lamento no poder entender todo al tiro.
Disfrutemos juntos los problemas.
Evitemos. Si ya no se puede hacer nada, olvidemos.
Construyamos una bicicleta donde todos pedaleemos.
Viajemos juntos, da lo mismo, de todas formas no llegaremos a la luna.
Pero más de una cosa buena aprenderemos en el recorrido.