martes, 11 de octubre de 2011

El vacío.

Los abrazos prometidos, las canciones escuchadas, el orgullo en tu mirada, las conversaciones prolongadas, tu habilidad, tu agilidad, tu forma de ver las cosas, libros leídos, saludos en la mañana y en la tarde, tu sonrisa, tu forma de hablar, a ti, viéndote dormir, que vallamos a comprar, caminemos sin hablar, tomar el metro, encontrarte, conocerte, admirarte.
Las peleas a todas las horas, tu mal humor, tus gustos musicales, el silencio al leer el diario, observar videos sobre cualquier cosa, tu sonrisa y tu nieto, el compromiso con la humanidad, tu mente abriéndose, tu forma de caminar, tus historias, simpático, el recuerdo, el deporte, como jugabas futbol, como conociste a mi madre. Fuiste (eres) la persona más noble de mi vida, ya no estás, junto a todas esas cosas más otra infinidad de sentimientos y recuerdos. Tu compañía.