domingo, 28 de agosto de 2011

Tiempo de fotografía.

El tic-tac del reloj, marcando el pulso del tiempo en la cocina.
Miro la muralla, el clavo se ha salido, y en concecuencia, el vidrio que protege el cuadro se ha quebrado.
Me paro, vuelvo a clavar, vuelvo a colgar.
La imagen sigue ahí, se ve más nítida, después de unos días, cuándo el reloj ya ha dado bastantes vueltas, la foto, sigue siendo igual de colores.
el tic-tac, ha sonado más veces de las que he mirado el cuadro. Me fijo en él, y veo que sus colores se han vuelto tristes.
Color rojo medio café, el azul menos claro y el verde casi negro.